Seguramente ya estarán pensando que este filósofo, agudo observador de la realidad que no deja cabo sin atar ni hipótesis sin corroborar ni dato que desestimar, dice boludeces sin sentido (como me lo remarcan a mi casilla de correo electrónico mis lectores ocasionales y algunos punteros políticos que me sugieren callarme la boca y cerrar el blog...).
Bien: como ven en las fotos, aprecian el Estadio Ciudad de La Plata y el desgraciado choque de trenes del otro día.
Una cosa diametralmente opuesta a la otra.
¿Diametralmente opuesta?.
Nooo, señores y señoras: una cosa es consecuencia de la otra!!!
En esta nueva contienda política entre la yegua dictadora y el manco obsecuente, estos hechos dejan en claro hasta dónde es capaz de llegar el gobierno dictatorial para doblegar a sus potenciales enemigos. Daniel Scioli decide dar por terminado los trabajos del estadio platense, una maravilla arquitectónica; en el espectáculo se ven las hordas de militantes forzosos, llevados por 50 pesos, un choripán y un papel de cocaína o un cigarrillo de paco. Pero... la voz mandante es el gobernador, que le refriega en la cara su poder a la trastornada que nos (des)gobierna.
-Fijate Cristina, si me postulo te paso la escoba-
-¿Ah, sí? Y yo te voy a cargar algunos muertos para que no te voten-
Enseguida, como Ferrobaires depende directamente de Julio de Vido, recibió un llamado extraño.
-Saboteen a La Martita que Danielito me debe una-
Como sabrán, un tren chocó a otro con los 5 muertos y los 100 heridos. Toda la culpa se la echaron a la gobernación para desgastar su imagen pública y quitarle votos para dárselos al progre de café Sabatella (famoso por su obsesión aconchetizante en Morón, y jamás invertir un peso en los hospitales de Haedo y de Morón ni en las escuelas del partido, que se caen a pedazos). Y hasta los medios olvidaron que los trenes de larga distancia dependen del gobierno nacional ya que el ministerio de De Vido los controla...
En conclusión: ordenaron despachar una locomotora a la que le rompieron los frenos para que esto suceda; los motorman lo dijeron entrelíneas: el problema viene de más arriba de nosotros.
Lectores: estas cosas seguirán sucediendo. Máxime teniendo en cuenta que el orangután Moyano ha decidido exterminar los ferrocarriles y reventarnos a camiones y micros y colectivos, lo que este suceso le viene como banana al mono. Cuídese mucho, la guerra electoral arrancó y todos somos potenciales víctimas.
Sí, fue un sabotaje a la locomotora, los obligaron a circular un tren sin frenos luego de que unos muchachos amenazaran a la familia de los motorman y pidieron a los señaleros que se hagan bien los boludos...
Copien y publiquen, nuestras vidas corren serio peligro. Si no hacemos como en Egipto, estamos fritos!!!!